Ubicada
en la empinada montaña Chuckanut y con un entorno sencillamente espectacular,
la casa cuenta con un marcado estilo japonés al interior, donde los niveles se
apoderan de la arquitectura partiendo por el salón que cuenta con dos niveles y pisos diferentes, un primer piso en color gris abre paso al salón en sí en un nivel más alto y con un piso íntegramente trabajado en madera.
Una vivienda alimentada por paneles solares, sistema ecoresponsable y 100% ecológico.
Las áreas se dividen entre la de invitados al norte y la de los propietarios al sur, este último espacio incluye una oficina oculta, un patio lateral, sala de ejercicios, sin contar las habitaciones mientras que un grupo de puertas correderas se abren para revelar una variedad de ambientes incluyendo las oficinas, bares y escalera de madera Tansu Roja de China, escalera que es punto focal de atracción y decoración que además da paso al dormitorio principal.
Cabe señalar que el sentido ecoresponsable de esta casa viene de la mano de la serie de paneles solares instalados aprovechando uno de los desniveles del terreno, paneles que proveen de calefacción y sistema de agua caliente a la vivienda.
El entorno se mimetiza con el tratamiento dado a la decoración interior, marcada por elementos naturales como la piedra, esta vez presente en el baño.
Los desniveles marcan el estilo de la residencia, en la foto se observa el piso oscuro que antecede al piso elevado en madera donde se disponen el comedor y la cocina.
Una vivienda dotada de un paisaje maravilloso, completamente natural.
Los paneles solares se instalaron aprovechando la irregularidad del terreno.
Los elementos naturales se fusionan con colores y formas modernas incluidas en muebles.
Detalle de la moderna escalera que da paso al segundo nivel de la casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario