Creadas por Álvaro Catalán de Ocón estas lámparas son un ejemplo más de la genialidad de los diseñadores por dar vida a accesorios utilitarios y decorativos a partir de materiales reciclados y además con producción sostenible.
Motivado por su viaje a Colombia el año 2011 en el cual se hablo del tema de la contaminación de la amazonía por las botellas PET, el diseñador decidió dar un nuevo enfoque y una posibilidad de alargar la vida de tan odiosos materiales convirtiéndolos en una serie de lámparas colgantes tejidas de plástico PET proveniente de botellas descartables.
Catalán involucró a las comunidades de la zona en la fabricación de estas lámparas de techo que empezaron a ser producidas el 2012 y hoy son símbolo de PETlamp.ORG.
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