El diseñador polaco Tomek Michalski nos muestra hoy una vivienda que diseñó en medio de un bosque y cabe señalar que con este proyecto hace su incursión en el mundo de la arquitectura y, ¡qué bien lo hace!
La construcción tiene una forma poligonal que logra mimetizarla con el medio que la circunda, el diseño tiene capacidad para 2 ó 3 personas y creo que a nadie le cabe duda que este es un refugio paradisiaco por donde se le vea.
La vivienda cuenta con ventanales de importante tamaño que permite no solo gozar de las vistas del bosque sino también que el interior se conjugue con el exterior.
El interior de la vivienda predomina la madera contrachapada. En el primer nivel la vivienda tiene el salón que es un espacio abierto que alberga la sala y la cocina además hay un cuarto de baño mientras que al segundo nivel se accede mediante una escalera que nos lleva a las habitaciones que siguen la forma del techo inclinado.
Finalmente, cabe señalar que esta vivienda, además de ser un perfecto ejemplo de arquitectura no agresiva es ecorresponsable ya que para la construcción se utilizaron materiales naturales de origen y producción local.
Detalle de la ventana en el techo
Interior de la vivienda con madera contrachapada
Habitación con muros que acompañan la inclinación del techo
Plano
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